domingo, 13 de enero de 2013

Correr en la nieve, es posible

Aunque esté todo nevado, hoy he salido a correr. Antes lo pregunté en la universidad: ¿puedo correr por las calles? Puede parecer una pregunta tonta, pero nunca se sabe. Recuerdo una escena de la película Grand Canyon: la policía detiene a un chico simplemente porque estaba corriendo (y bueno, también, y quizás más importante, porque era negro). En un país donde la gente acostumbra a moverse de un sitio a otro siempre en coche, correr por la calle quizás no sea muy normal.

Y bueno, luego estaba lo más obvio: ¿correr por las calles nevadas? Seguramente no es muy normal.

Sin embargo, mis dudas eran infundadas.

A mí pregunta me contestaron que sí, que podía correr por las calles. Y me he estado fijando durante los últimos días y, efectivamente, a veces hay gente corriendo por la calle. Así que hoy me he decidido.

¡Madre mía, qué frío! Claro, el tiempo dice que hace ¡¡¡-16ºC!!!


Claro, y en Alicante me da pereza salir a la calle a correr cuando hace menos de 10ºC.

Antes de salir a correr he estirado en el apartamento. En cuanto he salido por la puerta me he puesto a correr. Al principio, todo iba bien, pero poco a poco las manos se me iban enfriando. Además, el reflejo del sol en la nieve me molestaba, así que a los 18 minutos estaba otra vez en el apartamento para ponerme los guantes y las gafas de sol.

Al final he corrido 50 minutos. La sensación de correr por la nieve era muy agradable (realmente no corría "en la nieve", porque corría por sitios donde la nieve se había limpiado y sólo había un par de dedos de nieve), ya que amortigua la pisada. Además, hace un ruido muy característico.

He corrido lento y la pisada la he cambiado para que fuera más plana y así evitar posibles resbalones. Pero cuando llegaba a una zona sin nieve, por ejemplo, cuando corría por el asfalto, volvía a correr normal y más rápido.

Ha sido muy interesante. He podido conocer de una forma rápida y "sin levantar sospechas" los alrededores del sitio donde vivo. Además, las calles estaban prácticamente vacías.

Eso sí, la próxima vez saldré a correr también con gorro, al final no sentía las orejas, al tocarlas parecía como si no fueran mías.

Logan está situada a 4,534 pies, o lo que es lo mismo, 1,382 metros. A esta altura hay un 10% menos de oxígeno que a nivel del mar. No lo he notado, seguramente porque he esperado unos días antes de salir a correr.

Por cierto, durante mi carrera me he cruzado con una persona que también estaba corriendo y a lo lejos he visto a otra. Yo no era el único loco...

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