En este parque visitamos un par de puntos y realizamos una pequeña excursión de un par de horas. Lo más interesante fue el colorido de las montañas, muy variado:
Y de cerca también era muy interesante, parecía que habían sido talladas y pintadas por el hombre:
Después pusimos dirección a Flagstaff, de vuelta a Arizona, para al día siguiente visitar el Gran Cañón, "el premio gordo" del viaje. Así que tuvimos que desandar el mismo camino que habíamos hecho dos días antes, volvimos a ver el lago Mead y la presa Hoover:
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